Instalar suelo radiante en el hogar: precio y recomendaciones

Instalar suelo radiante en el hogar es muy interesante por varias razones:

• Ofrece el máximo confort en invierno
• Es un sistema muy eficiente
• Podrás refrescar la vivienda también en verano

Ahora bien, no se trata de un sistema aconsejado para cualquier vivienda.

Tendrás que valorar si el precio encaja en tu presupuesto y si tu vivienda es idónea para utilizarlo de forma eficiente.

Para resolver ambas cuestiones te he preparado este post con toda la información que puedas necesitar.

¿Cuánto cuesta el suelo radiante?

Vamos a empezar por una de las cuestiones más importantes: el precio.

Debes saber que se trata de una inversión más elevada que otros sistemas de calefacción, pero no por ello debes desecharlo.

En el coste final influirán muchos factores, pero hay dos que que marcarán en gran medida el precio:

1. El tipo de suelo radiante. Aquí tendremos que elegir entre el suelo radiante de agua caliente o el eléctrico.
2. La superficie de la vivienda. Al tratarse de un intercambiador de calor que cubrirá todo el suelo será más caro cuantos más metros cuadrados haya que cubrir.

Para facilitarte la estimación del precio final te he preparado esta calculadora con la que conseguir un presupuesto acorde con tus necesidades:

Pero si lo que quieres es un presupuesto real pulsa en el botón que hay a continuación. Podrás conseguir presupuestos de empresas de tu zona y específicos para tu vivienda.

Ten presente que el precio del suelo radiante depende de muchos otros factores:

• Mano de obra: en función del coste a la hora de los diferentes profesionales el precio puede variar de forma sustancial
• Materiales empleados: el suelo radiante se compone de diferentes capas, y en cada una se podrán utilizar materiales de mayor o menor calidad.
• Vivienda: si la vivienda se encuentra en construcción el coste será menor, ya que no habrá que realizar trabajos precios. Pero si la vivienda ya está construida será necesario levantar el suelo existente o rebajar la altura de las puertas para salvar la nueva elevación del suelo.
• Otros: desescombro, nivelación, tipo de pavimento… hay otros factores que también influirán en el precio final, por lo que siempre es mejor pedir presupuestos detallados a las empresas para poder conseguir la mejor estimación.

Por eso, cuando solicites un presupuesto, intenta dar la mayor cantidad posible de información (metros de la vivienda, tipo de suelo existente, sistema de calefacción actual…). Así te podrán dar un precio final más aproximado.

Precios por metro cuadrado

Puesto que son varios los factores que determinan el precio final conviene ver el coste del suelo radiante como un rango de precios.

Por eso, en función del tipo de tecnología, el precio por metro cuadrado se situará entre los siguientes valores.

Como puedes ver el suelo radiante eléctrico tiene una instalación más económica, pero debes saber que es menos eficiente. Pagarás una factura eléctrica más elevada que si optases por el la modalidad con circuito de agua (que es la más extendida).

¿Cuándo merece la pena instalar el suelo radiante?

Hay que entender que en función de las necesidades de cada persona y cada hogar encajará mejor un sistema de calefacción u otro.

En primer lugar se trata de una instalación con un precio más elevado, por lo que pasarán unos cuantos años hasta que la amortices.

Esto no supondrá un problema para viviendas en las que sepas que vas a vivir durante los próximos 10 años. Y cuanto más tiempo pases en ella, mejor.

Es un sistema muy eficiente, por lo que pagarás menos en tus facturas, pero para poder disfrutar esta ventaja tendrás que usar el suelo radiante durante varios años.

Es una instalación que se tarda más en amortizar, pero que a la larga supone un gran ahorro en calefacción.

En segundo lugar tienes que saber que la inercia térmica del suelo radiante es alta.

Esto quiere decir que tardará en calentar la vivienda, pero una vez apagues la calefacción, tardará en enfriarse.

Esta lentitud a la hora de calentar y enfriar el hogar hace que los cambios de temperatura sean muy suaves. No notarás bruscos cambios de temperatura.

En el caso opuesto tenemos los calefactores: cuando los enciendes notas el calor rápidamente, pero una vez los apagas la casa se queda fría enseguida.

Esto tiene un inconveniente, y es que normalmente acabamos subiendo la temperatura del hogar a un valor mayor al deseado, provocando que después tengamos una sensación de frío a pesar de que la temperatura no sea tan baja.

Con el suelo radiante esto no pasa. Será más fácil mantener una temperatura estable, de forma que nunca excederemos la temperatura recomendada para invierno.

Como contrapunto debes tener en cuenta que necesitarás encender la calefacción con suficiente antelación, al mismo tiempo que deberás apagarla unas horas antes de marcharte.

Por eso es una gran solución en viviendas que se encuentran buena parte del día ocupadas. Si en tu casa solo estáis desde última hora de la tarde hasta la mañana siguiente no será una buena opción, pero si se encuentra ocupada la mayor parte del día es el sistema de calefacción ideal.

Debido a la alta inercia térmica se recomienda el suelo radiante en viviendas que pasen ocupadas buena parte del día.

Ventajas del suelo radiante

¿Dudas si el suelo radiante es una buena opción? Es normal pensárselo con este sistema de calefacción, ya que la inversión es más alta que otros sistemas.

Para ayudarte con tu elección te he listado varias ventajas que quizás no tenías en mente:

• Totalmente invisible

Al tratarse de un sistema que queda oculto bajo el suelo no habrá ningún elemento a la vista.

Esto no solo supone una ventaja estética, sino que además no tendrás que preocuparte por la colocación de los muebles.

Cuando tienes radiadores debes tener cuidado de no taparlos ni cubrirlos, pero con el suelo radiante esta preocupación desaparece.

• Mejor distribución de calor

¿Alguna vez te has parado a pensar por qué se colocan los radiadores en el mismo lugar en el que están las ventanas? Esto se debe a que es necesario optimizar la distribución del calor, y esta es la mejor zona.

Con el suelo radiante se obtiene una distribución uniforme, de forma que no quedarán zonas más frías en las estancias. Se mantendrá la misma temperatura en todas las zonas.

• Máxima eficiencia energética

Al tratarse de un sistema de distribución de calor de baja temperatura se obtienen las máximas eficiencias.

No obstante, la eficiencia también vendrá marcada por el equipo de generación de calor. Aquí lo más recomendable es la aerotermia, ya que es la tecnología que mejor rendimiento ofrece.

• Funciona con diferentes equipos

Pese a que la mejor opción es la aerotermia, también se puede utilizar con otros sistemas.

Podrás optar por un equipo de aerotermia, geotermia, caldera de gas, caldera de pelets… No te tendrás que limitar a la bomba de calor y podrás utilizar el sistema que ya tengas en el hogar si es compatible.

• Revalorización de la vivienda

Tener una vivienda con suelo radiante hará que se revalorice si más adelante la vendes o alquilas.

Este probablemente no sea tu objetivo, pero sabrás que no será una inversión perdida si más adelante decides mudarte.

• Puede funcionar como suelo refrescante

La opción de suelo refrescante solo es posible para el suelo radiante por circuitos de agua.

Se trata de una opción para refrigerar la casa en verano. Al igual que se puede hacer circular agua caliente por los circuitos en invierno, también se podrá impulsar agua fría en verano.

Aquí el principal problema es la condensación, por lo que podrá limitarse el poder refrigerante en los climas con alta humedad, pero es una buena forma de enfriar tu casa.

Recomendaciones para usarlo de forma eficiente

Antes de terminar este post quiero darte algunas recomendaciones para aprovecharlo al máximo.

Se trata de un sistema de disipación de calor muy eficiente, pero si no lo utilizas correctamente perderá parte de esa eficiencia. Toma nota de los consejos:

• Combina el suelo radiante con una bomba de calor: tanto la bomba de calor de aerotermia (aire-agua) como la bomba de calor geotérmica (tierra-agua o agua-agua) son las soluciones más eficientes. Opta por estos sistemas siempre que sea posible.
• Establece las temperaturas con antelación: al ser un sistema de alta inercia térmica necesitarás encender o apagar la calefacción con suficiente antelación. Así tendrás la temperatura deseada cuando estás en casa.
• Instala un termostato inteligente: existen modelos de termostatos que se conectan al wifi de la vivienda y se pueden controlar a través del móvil (aquí puedes ver uno de los más vendidos en Amazon). Gracias a esta opción podrás activar la calefacción desde cualquier lugar y así poder anticiparte a tu llegada a casa.

Si te has quedado con dudas puedes ver la entrada dedicada enteramente a explicar lo que es el suelo radiante. Ahí encontrarás información adicional para que te hagas una idea real de lo que supone tener una vivienda con este sistema de calefacción.

Pero si ya lo tienes claro el siguiente paso es solicitar presupuestos, y en el siguiente botón los podrás conseguir de manera totalmente gratuita: